Ictericia neonatal

La ictericia es la coloración amarilla de la piel y de las mucosas debida a un aumento de bilirrubina en la sangre.

¿Por qué se produce?

Los bebés nacen con un exceso de glóbulos rojos que se rompen los primeros días de vida. Esto provoca un aumento de la bilirrubina, que debe ser eliminada por el hígado y por la orina.
La ictericia en el recién nacido puede ser:

• ICTERICIA FISIOLÓGICA: en este caso el exceso de glóbulos rojos y la inmadurez del hígado hacen que aumente la bilirrubina los primeros días. Es una situación normal y transitoria, siempre que las cifras no son muy altas ni dure muchos días. Es más frecuente en los prematuros y en los recién nacidos de bajo peso.
• ICTERICIA PRECOZ POR LACTANCIA MATERNA: debida a una baja ingesta y cierta deshidratación. Esta ictericia cede al aumentar las tomas.
• ICTERICIA PROLONGADA: algunos bebés alimentados con leche materna pueden presentar una ictericia después de la primera semana, debido a a sustancias de la leche que aumentan la bilirrubina en la sangre. Suele desaparecer entre los 1-3 meses de vida. 
• ICTERICIA PATOLOGICA: debida a una enfermedad.
• PRECOZ: aparece en las primeras 24 horas de vida y tarda más en desaparecer 
• TARDÍA: dura más de 2 semanas y la orina es más oscura y/o de las heces blancas. En este caso puede haber problemas de hígado y vías biliares.

¿Qué síntomas da?

El síntoma principal es la coloración amarillenta de la piel y las mucosas. La ictericia fisiológica empieza entre el 2º y 4º día de vida; primero por la mucosa ocular y la cabeza y avanza hacia los pies. Desaparece en sentido inverso, desde los pies hasta la cabeza en las dos primeras semanas de vida.
La mayoría de los casos se resuelven en los primeros días sin dejar secuelas; pero si las cifras de bilirrubina son muy altas, esa bilirrubina puede acumularse en el cerebro y causar lesiones que desencadenarían otros problemas. 

¿Cuándo hay que consultar?

Se debe consultar al pediatra si:

• Aparece el primer día o se alarga más allá de los 15 días de vida.
• Va en aumento.
• Tiene dificultad para comer o signos de deshidratación (lengua seca, no orina, ojos hundidos…)
• Presenta irritabilidad, somnolencia excesiva o mal aspecto.
• Si tiene fiebre.
• Orinas muy oscuras o deposiciones blancas.

Generalmente, no hay que hacer nada, simplemente el pediatra controlará al recién nacido. En algunas ocasiones se tendrá que hacer un análisis de sangre para determinar los niveles de bilirrubina. 

¿Cómo se trata?

Es muy importante que el bebé esté bien hidratado y alimentado. Si toma lactancia materna debe continuar con ella.
En los casos leves, la mayoría, se recomienda poner al recién nacido en una zona de la casa con luz solar, pero no ponerle directamente al sol, ya que podría causarle quemaduras en la piel.
Si las cifras de bilirrubina son altas habrá que ingresar al recién nacido para tratarlo con fototerapia. 
Si hay alguna enfermedad de base (ictericia patológica) se tratará la causa además de la ictericia.